La Fiscalía General de Colombia indicó que, a través de una investigación, se logró capturar seis miembros de la Policía Nacional que estarían involucrados en un caso de corrupción al interior de la estación de policías de Fontibón en Bogotá.
En concreto, habrían recibido pagos mensuales para permitir el ingreso de armas, drogas, licor, celulares e incluso dinero, además de visitas conyugales en horarios no permitidos. La tarifa cobrada por los acusados iba desde los 20 mil hasta los 600 mil pesos colombianos, dependiendo de lo solicitado por los detenidos.
La Fiscalía indicó que se trataría de una organización criminal, que utilizaba diversos métodos para ingresar los objetos ilegales, como maletas, bolsas, botellas de agua o sacos de papa. A esto se suma, que los uniformados “se habrían concertado con custodios e internos para vender estupefacientes como tucibi, marihuana y bazuco. También habrían presionado a los internos con el pretexto de brindarles seguridad y que pudieran acceder a celdas especiales o con algunas comodidades.
Los uniformados fueron capturados el pasado 05 de septiembre y enviados a prisión. La juez ordenó que sean recluidos en el pabellón de servidores públicos de la cárcel la Picota de Bogotá. Las condenas fueron determinadas según la participación y responsabilidad independiente de cada uno, pero que tendrán que responder por los delitos de concierto para delinquir agravado y cohecho propio.
Este caso no es aislado, y es similar al conocido la semana pasada, cuando cinco policías de las estaciones policiales de Suba y Fontibón fueron capturados por colaborar con bandas criminales, dejándolos distribuir narcóticos a cambio de sumas de dinero. En total, los montos recibidos por el grupo de patrulleros llegaban a los 15 millones de pesos mensuales.
Imagen: Infobae
