Hay brechas con las mejores prácticas de gobierno corporativo.
Solo el 45% de las empresas IPSA realiza evaluaciones de desempeño con el apoyo de entidades externas, y apenas el 21% de las compañías cumple con los estándares internacionales de diversidad de género, de acuerdo con una revisión de las memorias anuales 2023 que realizó BH Compliance. Mejor es la cifra de firmas IPSA que cuentan con Código de Buenas Prácticas de Gobierno Corporativo propio, que alcanza 55%.
Respecto a las evaluaciones de desempeño, Susana Sierra, directora ejecutiva de BH Compliance, afirma que en Chile la práctica más común es realizar autoevaluaciones en los directorios, mientras que en otros países hay preponderancia por evaluaciones externas.
En materia de género, tanto Alemania como Italia exigen un mínimo de 30% de mujeres en los directorios. En Reino Unido se sugiere que exista un 33%, mientras que en Francia se establece que debe haber al menos un 40% de presencia femenina.
En el caso de las empresas IPSA, solo el 21% de las firmas están por sobre el estándar mínimo internacional, afirma Sierra. “¿Por qué las buenas prácticas internacionales dicen que tienen que ser un 30%? Está demostrado que cuando solo uno es distinto, cuesta mucho producir cambio. La gracia de tener diversidad es que la toma de decisiones es de mucho mejor calidad”, explica.
Pese a que en el país se tiende a hablar solo de diversidad de género, Sierra afirma que esta también debiese ser de profesión, de nacionalidad y de edad, especialmente en el caso de las empresas IPSA que tienen presencia en más de un país.
Publicado en El Mercurio